¿CÓMO Y DÓNDE ACARICIAR A UN CABALLO?

¿A quién no le gusta acercarse y acariciar a un caballo? El caballo es un animal cariñoso y noble, pero hay que saber cómo tratarlo, hay que tener cuidado si no conocemos al caballo, ya que puede reaccionar bruscamente y hacer daño. Por ello, desde la Hípica Bolívar os vamos a dar una serie de trucos y consejos para acariciar a los caballos y crear un buen vínculo. ¡Sigue leyendo para saber más!

  1. Acercarse con cuidado. Si es el primer contacto con un caballo o no hay mucha confianza, debes acercarte lentamente y poco a poco, sin hacer movimientos bruscos. Si no conoces al caballo tampoco sabes su personalidad, y puede reaccionar de manera brusca al percibirte como un extraño o un peligro. Por lo tanto, el primer paso es la tranquilidad y la lentitud, dejar que el caballo nos huela y nos identifique como un amigo.
  2. Acariciar suavemente. Una vez nos hemos acercado, el caballo nos reconoce y podemos tocarlo, hay que acariciarle de manera suave, evitando las palmadas. Mucha gente cree que darle palmadas al animal es una forma de acariciarlo, pero es mejor simplemente dibujar caricias para que se calmen y se relajen.
  3. Colocarse de frente. Nunca debes colocarte en la parte posterior del caballo y acariciarle desde detrás. Por mucho que te conozca, no te está viendo y te puede dar una coz y hacerte daño. Por tanto, hay que situarse siempre a los lados o de frente, para que el caballo nos vea bien.

 Zonas en las que acariciar

  • Cabeza y cuello. La cabeza y el cuello son dos zonas que quedan muy a mano cuando nos aproximamos a un caballo, y ¡también son dos de sus zonas favoritas! Se puede acariciar al caballo en la frente, dibujando pequeños círculos. También les suele gustar la zona de las orejas, aunque se debe tener cuidado porque no es una zona muy habitual y pueden reaccionar de manera agresiva. Por otro lado, el cuello y las crines son zonas en las que les gusta recibir caricias ¡no hay que olvidárselas!
  • Dorso y espalda. La zona en la que se coloca la montura también debe recibir cuidados y caricias, sobre todo después de montarle o cepillarle, ya que es una de las zonas que más carga y tensión soporta.
  • Vientre y pecho. Ambas son zonas de difícil acceso y suelen sentir picores, por mosquitos o por el sudor. ¡Rascarles y acariciarles en estas zonas seguro que les gusta!
  • Nalgas. Las nalgas se pueden considerar como zona peligrosa. Como los caballos no llegan a rascarse, les gusta que les rasquen, pero hay que tener mucho cuidado y no situarse detrás, ya que nos puede dar una coz, sentirse incómodo o asustare.

Estos son algunos de los consejos para poder acariciar a tu caballo correctamente. Sin embargo, hay que estar muy atento a sus movimientos y reacciones porque puede ser que no le guste una zona concreta o que le incomode y sea mejor que acaricies otra. Os invitamos a formar parte de la gran familia de la Hípica Bolívar, con las clases de equitación o el pupilaje. Ubicada en Borriol, Castellón, cuidamos de todos vuestros caballos con mucho cariño, dándoles todo lo que necesitan para que estén listos cuando vosotros vengáis. ¡Os esperamos!